Ruinas del Santuario [ Sheigram de Capricornio - Libre ]

El Santuario se encuentra rodeado de decenas de ruinas a sus alrededores. Seguramente en la antiguedad aquel era un lugar repleto de edificios destinados a adorar a los dioses, o quiza mas centrados en Atenea. Sin embargo, las guerras constantes han cobrado su precio, y a travez de los siglos pasaron de ser bellas obras de arte arquitectonicas, a ruinas. Columnas incompletas y desquebrajadas. Suelo irregular con presencia de algunas baldozas de marmol desgastadas por el tiempo. Incluso la madre naturaleza se ha apropiado de gran parte de los lugares, volviendo a tomar lo que alguna vez fue suyo.

Ahi, en una de tantas ruinas, se ve caminar a dos personas. Ambos poseian ropas de entrenamiento, y solo uno de ellos carga una mochila. Aquel protegido por la constelacion de Sagitario se detiene en una de las columnas. Posa su mano sobre ella ya que se encuentra a la altura de su cintura. Observa atentamente a su alrededor y hace un gesto de aprobacion.

--- Creo que aqui estara perfecto --- expreso con tranquilidad. --- Tu que opinas Sheigram? Se ve como un buen lugar para pelear por quinientos dias? --- y se rio. Seguramente el santo de Capricornio entenderia aquello.

Desde luego por como se encuentra todo si que parece que hubiesen peleado por quinientos días en este sitio... - Respondió mientras se quitaba la mochila y la dejaba sobre una de las columnas semiderruidas. - Pero me parece un buen lugar.

Se giró y echo un vistazo a sus alrededores. Parecía un lugar tranquilo sin que tuviese demasiada afluencia de gente como solía ser comun en zonas más cercanas al santuario. Lo cierto era que a pesar de que se encontrase en ruinas tenia cierto encanto. Había perdido la majestuosidad que tuvo en el pasado pero le gustaba que la naturaleza estuviese mezclándose con las ruinas. Las enredaderas trepaban por las columnas llenando de verdor y color las pálidas rocas.

Bueno, toca establecer las reglas del combate... - Dijo mientras estiraba un poco los brazos. - Aunque mi punto fuerte son los ataques a distancia... algo que imagino también sucederá contigo. - Hizo el gesto de tirar con arco. - Aconsejaría simplemente un combate físico, sin técnicas. Así podremos conocer nuestro modo de combate sin acabar hechos salami o como un colador. Que te parece. - Dijo con seriedad sin apartar la mirada de su compañero. Lo cierto era que siempre había entrenado en solitario y era mucho más fácil lanzar sus ataques contra una roca o el mar, que sobre un compañero, sobre todo si éste no portaba su armadura.

A Gusaar le hizo cierta gracia la formalidad de Sheigram a la hora del combate. Realmente es buena idea establecer las reglas antes de empezar. No pudo evitar sonreir cuando hizo el gesto de disparar un arco. El comentario del salami y la coladera le hizo aun mas gracia, no solo por lo gracioso de las palabras, si no la expresion seria en la que lo decia. Es increible la facilidad del santo de Capricornio para decir bromas de una manera tan seria.

--- Tienes razon, establecer los limites es buena idea amigo mio. Y ciertamente, no creo que enfrentar a la mitologica Excalibur sea muy sabio. --- dijo mientras dobla su brazo diestro y finge un rostro de dolor. Como si su brazo hubiera sido cortado. --- Luego como lanzaria mi flecha?. Eso si seria injusto. --- y se rio.

Entonces se ajusto sus ropajes asegurandose que esta todo en su lugar. Removio los protectores de su cuerpo que no poseia Sheigram. Seria muy injusto luchar en desventaja. Algo que a Gusaar le molesta. Coloco su mano sobre su hombro opuesto y empezo a girarlo lentamente. Luego el cuello. Y asi realizando estiramientos para calentar.

--- Estoy de acuerdo con las reglas. Quiza agregaria la posibilidad de utilizar expresiones cosmicas sin necesidad de tecnicas como dices. --- expreso mientras estiraba sus piernas. --- con respecto a mi estilo. Aunque no lo creas, y sea bueno con el arco; soy un poco mas balanceado y me gusta el combate cuerpo a cuerpo. Asi que quiza te enseñe una que otra cosa. --- se rio y lo vio con cierto resplandor en su mirada.

El combate habia empezado quiza sin que Sheigram lo notara. Las palabras expedidas por el santo de Sagitario tenian la intencion de desestabilizar a su oponente. Quiza por el caracter de Capricornio, aquello no surtiria efecto. Pero en un oponente mas impulsivo y orgulloso, aquello seguramente lo hubiera empezado a sacar de quisio y presipitarse. Abriendo espacios en sus defensas.

Sin perder mas el tiempo, abrio firmemente el compas de sus piernas. Coloco una guardia balanceada con sus dos brazos y miro atentamente a su oponente.

--- Cuando gustes...

No, sin duda seria una terrible perdida si el santuario perdiese a su cupido... - Dijo sonriendo levemente al ver como Gusaar se sujetaba el brazo imitando el gesto de dolor. - Jamás me atrevería a tal cosa, sino como encontraría Hikari su media naranja sin tu estimable ayuda.

No se sorprendió al ver como Gusaar se quitaba los protectores para asi poder luchar en igualdad de condiciones. Después de todo era un hombre honorable.

¿Enseñarme un par de cosas eh? - Enarcó una ceja mirando de soslayo a Gusaar. - Siempre estoy dispuesto a aprender. - Se apartó de la mochila, caminando hasta situarse a varios metros de ella. - Pero deja que te diga amigo mio... que aunque suela utilizar ataques a larga distancia eso no significa que tenga carencias en el cuerpo a cuerpo... - Miró fijamente a Gusaar mientras se posicionaba frente a él. - Después de todo es donde más mortífero puede ser el filo de una espada... ¿verdad?

Giró su cuerpo un poco quedando su hombro derecho frente a gusar. Separó sus piernas y flexionó levemente las rodillas mientras alzaba un poco sus brazos hasta la altura de su pecho. - Te cedo el honor de comenzar...

Gusaar le hubiera contestado a Sheigram algo respecto a lo que dijo sobre cupido. Tenia varias respuestas en la mente, desde el que no hacia falta pues ya habia encontrado a la pareja ideal, a otro monton de cosas. Pero ahora lo que le interesa es el combate, y el pulir sus habilidades ante un nuevo adversario.

El santo de Sagitario de alegro al escuchar que Sheigram aunque se sentia mejor a la distancia, tuviera esa confianza de decir que en un combate a corta distancia tambien es diestro. Le tomo unos segundo analizar su situacion actual. La defensa de su adversario. Su posicion y sus aperturas. Incluso la mirada y su respirar. Todo lo que es necesario tener encuenta para intentar predecir los movimientos del contrario.

--- Veamos pues que tan bueno es un espadachin sin su espada --- dijo en tono burlon.

Sus musculos se tensaron y sus pies se posicionaron mas firmemente en el suelo. Su cuerpo se preparo para iniciar el combate. La energia rebosa en su cuerpo mientras cada celula del mismo se llena de aquella escencia del universo, el cosmos. Habian quedado en no utilizar tecnica alguna ante la falta de las armaduras, pero aquello no indicaba que no podian hacer uso de su cosmos para mejorar el rendimiento fisico.

--- Aqui voy. Te mostrare mi nueva tecnica inspirada por ti! --- expreso en un intento tonto de sorprender a Sheigram. --- Flecha de Cupido!

Y con un fuerte impulso que levanto el polvo del suelo donde estaba, se lanza ferozmente contra su adversario. Llego en tan solo segundos a donde esta el caballero de Capricornio. Se perfilo para deliberar un poderoso golpe al pecho de su compañero con la diestra. Pero fue un intento de engaño, ya que lanza un golpe menos poderoso con la zurda al rostro de Sheigram esperando que su atencion estuviese en su puño derecho. Y aprovechando la posible sorpresa, ahora si delivera el golpe con su diestra el mero plexo solar. Una jugada sencilla, solo queda por ver que tan efectiva.

Tan bueno como un arquero sin su arco ni flechas... - Respondió a la mofa sin bajar la guardia.

Su cuerpo se tensó al ver como su adversario se preparaba para atacar. Sintió como el cosmos aumentaba en él por lo que hizo lo propio y comenzó a alzar el suyo. Todos sus sentidos estaban centrados en el combate, agudizandose para anticiparse a cualquier movimiento o sonido.

Al escuchar sus palabras achinó la mirada preparándose para algún ataque especial. Pero lo que no se espero fue el nombre, flecha de... ¿cupido? Sin que siquiera tuviese tiempo a procesar la broma vio como Gusaar se abalanzaba a toda velocidad hacia él. Fue tan rápido que en segundos lo tenia frente a él a punto de golpearle en el pecho. Con su mano izquierda bloqueó el golpe y viendo como su zurda se acercaba a su rostro alzó el antebrazo derecho para desviar su puño. Los golpes se sucedieron a gran velocidad siendo hábilmente bloqueados o esquivados por ambas partes en una perfecta sincronizacion de movimientos técnicos. El sonido de la naturaleza quedo rápidamente oculto bajo el de los golpes de ambos santos.

Con cada segundo que pasaba no podia más que admirar la destreza de su adversario, admitiendo mentalmente que sin duda un entrenamiento así era mucho más efectivo para los reflejos y la mente que hacerlo en solitario.

Tras bloquear un poderoso golpe hacia su plexo solar y en un intento por pillarlo desprevenido, se agachó bruscamente al tiempo que giraba su cuerpo para hacer un barrido con su pierna derecha y así intentar hacerle caer.

Nada más dar la patada a ras del suelo vio como Gusaar saltaba por los aires tomando en cuestión de segundos una posicion de ventaja sobre él. Viendo que eso le dejaba en una situavion vulnerable, y sin siquiera esperar a ver cual seria su siguiente movimiento, se apoyó en sus brazos y flexionó sus piernas hasta quedar con el cuerpo encogido cabeza abajo. Acto seguido y sin perder la inercia se propulsó con sus brazos hacia arriba al tiempo que estiraba su cuerpo para ganar estabilidad. De ese modo consiguió ponerse en pie casi instantáneamente, justo en el momento en el que Gusaar golpeaba el suelo donde segundos antes había estado agachado. El terreno estalló en miles de pedazos por el impacto, levantando una leve humareda a su alrededor.

Tras ponerse en pie habia quedado de espaldas a Gusaar por lo que aprovechó para girar su cuerpo a gran velocidad mientras lanzaba una patada lateral hacia su compañero, justo a la altura de su costado.

Su estrategia de golpear a su compañero con una potente patada no había funcionado tal como esperaba. Aunque habia logrado impactar contra su brazo y a pesar de la tremenda fuerza con la que lo había hecho, Gusaar no sólo había logrado bloquear el golpe, sino que en cuestión de segundos había girado su cuerpo para asestarle un codazo a la altura de la sien. Fue tan rápido que ni siquiera había tenido tiempo de bajar la pierna, sin apenas tiempo para reaccionar, flexionó la única pierna que le sostenía para dejarse caer al suelo y así poder esquivar el golpe.

Su idea fue un tanto desesperada y a pesar de haber actuado instantáneamente vio como el codazo pasaba a escasos centímetros de su cabeza. Le faltó muy poco para recibir el golpe y lo que era peor, había acabado de espaldas en el suelo a los pies de su adversario.

Sin perder un segundo rodó hacia un lado y se levantó del suelo, centrando nuevamente su atención en su compañero para ver cual seria su siguiente movimiento.

El golpe de reversa parecia que iba a dar en su objetivo cuando nuevamente Sheigram decide lanzarse al suelo para evitarlo. Observando la posicion en desventaja de su oponente, Gusaar levanta la pierna y la baja con fuerza para intentar alcanzarle esta vez. Sin embargo, el caballero de capricornio rueda por el suelo haciendo que este falle en un poderoso estruendo que rompe la lozeta en la que golpeo. Su compañero habia podido escapar una vez mas, lograndose levantar.

El santo de Sagitario le volteo a ver con una sonrisa, perfilandose nuevamente contra el. Sacudio la mano con la que bloqueo la patada. La sentia un poco entumida. Se volvio a colocar en su posicion defensiva y una fiera aura dorada empieza a brotar de su cuerpo cual flama.

--- Uno a cero. Hora de la segunda ronda.

Entonces concentra parte de su cosmoenergia en su puño derecho y golpea fuertemente el suelo en direccion de Sheigram. Esta accion como las leyendas, hizo que la tierra se partiera en dos y se levantara un monton de escombros y una espesa nube de polvo y tierra. Sin embargo aquello tenia un otro proposito. La grieta se dirige a donde el santo de Capricornio se encuentra amenazando no solo en desestabilizarlo, si no en ser golpeado por la misma tierra partida.

Nada más levantarse del suelo vio como Gusaar había golpeado con fuerza con su pierna donde segundos antes había estado. Un golpe brutal si le llega a dar, estaba claro que se tomaba en serio su entrenamiento y eso le gustaba.

¿Uno cero?... - Dijo con calma mirando a su compañero. - Creo que por ahora vamos bastante igualados. -

Vio como Gusaar concentraba su cosmos en su puño para acto seguido golpear con fuerza el suelo. La tierra estalló en miles de pedazos levantando una gran cantidad de escombros y polvo, mientras la grieta avanzaba a gran velocidad hacia él.

Alzó la mirada hacia el cielo y al ver que tenia el sol a su espalda vio la oportunidad perfecta. Sin pensárselo demasiado saltó por los aires abalanzandose sobre su compañero desde donde éste quedaría cegado por el sol. Cerró su puño con fuerza y se dispuso a golpear el rostro de Gusaar aprovechando la inercia del descenso.

La batalla hasta el momento es pareja entre los dos santos dorados. Gusaar se toma las cosas en serio, y al parecer Sheigram ya se ha dado cuenta, que no dejara respiro. Sagitario habia agrietado la tierra con fin de alcanzar a su adversario. Sin embargo, este decidio evitarlo con un salto y aprovechar el sol a su favor para cegarle, proliferando un fuerte golpe a su persona. Pero para la segura sorpresa del santo de Capricornio, cuando llego a su posicion, el arquero ya no estaba.

Aquel ataque realmente habia sido una distraccion, mas que intentar dañar de verdad a Sheigram. La nube de polvo y tierra que habia levantado sirvio como una pantalla para moverse sin ser visto, y asi poder sorprender a su rival. Chasqueo su lengua.

--- Atras! --- grito con cierto tono de burla. Diciendo aquello para no tomarlo totalmente desprevenido.

Asi, aprovechando de la misma manera la posicion del sol, Gusaar ataco con un fuerte puntapie la espalda de Sheigram. Seguramente si voltea, seria cegado el por su propia estrategia y su golpe daria en el blanco. De igual manera, tenia una posicion ventajosa que podria cambiar el rumbo de su patada si decidiera moverse. De ahi en mas, realmente estaba disfrutando del entrenamiento.

Su puño no golpeó más que aire, lo que en un principio había sido un buen plan, no tardó en transformarse en algo nefasto. Le habían puesto una trampa y había caído en ella cual ratón al queso. Estaría indignado si no fuera porque no tenia tiempo ni para estarlo ya que la voz de Gusaar a su espalda le dejaba bien claro que aún no podía bajar la guardia.

Giró con rapidez sin tiempo apenas para alzar sus brazos en forma de X para protegerse. El impacto fue tan brutal que sintió como los músculos de sus brazos se resentian por el esfuerzo. Sus piernas comenzaron a retroceder por el suelo arrastrando su cuerpo hacia atrás, hasta que sin poder evitarlo, fue lanzado contra una de las ruinas. Chocó de espaldas contra uno de los pilares, haciéndolo estallar en miles de pedazos al atravesarlo, levantando una gran humareda a su alrededor.

Muy buen ataque... - Dijo mientras salía de entre los escombros, limpiando distraídamente su ropa. - Esta vez si que me has pillado desprevenido.

La estrategia habia dado sus frutos. Sheigram habia sido sorprendido por el movimiento de Gusaar y su engaño. La advertencia del caballero de Sagitario tambien habia funcionado, dandole la oportunidad a su compañero de elaborar al menos una torpe defensa para aminorar el daño de la patada. Capricornio contuvo el impacto, mas al final salio despedido a una de las columnas cercanas destrozandolas por completo. Se levanto y se sacudio. Luego dedico unas palabras a Gusaar.

--- Gracias --- le dijo con una sonrisa en los labios mientra sacude sus manos y toma una posicion mas relajada. --- De vez en cuando se me prende una neurona. --- se rie. --- No eres un oponente sencillo amigo mio. Realmente entrenar contigo es bastante provechoso. Tienes ganas de empezar la tercera ronda, o prefieres un descanzo?

Y queda a la respuesta de su hermano de armas, no sin antes ponerse de nuevo en guardia por si su respuesta fuera continuar el combate.

Hacía ya varios minutos desde que Genbu había hecho acto de presencia en aquel sitio, desde cierta distancia se dedicó solo a observar a aquellos santos doraros entrenar, la lucha completamente pareja dejaba ver el gran potencial de los dos guerreros quienes causando algunos estragos finalmente se detuvieron por un momento, se podía notar a leguas lo bien que se llevaban.
Para Genbu era difícil reconocerlos, las recientes guerras habían  acabado con la vida de varios camaradas y a quienes tenía en frente definitivamente eran santos que habían obtenido la armadura dorada recientemente.-

Ohh~ Buena pelea chicos, en verdad ha sido entretenido -Comentó en un tono alto para que estos le presenciaran. Genbu se encontraba sentado sobre una enorme roca, no vestía su armadura sin embargo la portaba en su caja la cual reposaba a su lado. Con un leve movimiento levantó un poco el sakkat que llevaba en su cabeza dejando así ver su rostro-


Armadura de Sagitario, armadura de Capricornio, ustedes son los nuevos santos que se unen a la guardia principal de Athena.. -Sonrió animado y despreocupadamente- Soy Genbu, es todo un placer conocerlos, a pesar de que seguramente ya llevan un tiempo aquí, es la primera vez que logro conocerlos..

-Genbu dejaba ver una personalidad completamente tranquila, así era, alguien despreocupado, incluso podría llegar a mal interpretarse como alguien perezoso y poco interesado en lo ocurrido pero la realidad era otra, Genbu solo veía las cosas siempre desde un lado positivo, amargar su existencia no estaba en su ritmo de vida.-

¿Una neurona eh? - Dijo enarcando una ceja mientras veía como Gusaar reía. Sin duda era una persona que solía estar de buen humor. - Si fuese un oponente sencillo entonces debería de preocuparme... y mucho. - Respondió con seriedad mientras desviaba su mirada hacia un lado, donde había percibido la presencia de otro Santo. - Creo que será mejor hacer una pausa.

Sobre una roca se encontraba el santo de Libra. Aunque aun no habia tenido el placer de conocerle, su armadura que se encontraba en su caja a su lado, identificaba con facilidad a su portador, el cual no dudó en presentarse al ver que habían hecho una pausa en su entrenamiento.

Saludos Genbu... - Inclinó levemente la cabeza a modo de saludo. - Mi nombre es Sheigram, es un placer conocerte.

Parecía que poco a poco comenzaba a conocer a los otros dorados y eso era una buena señal. Se preguntaba que clase de persona seria Genbu, a primera vista parecía alguien tranquilo y eso estaba bien. Aunque Gusaar también lo había parecido en un principio y no tardó en sacarle canas verdes con sus chinchamientos. Le dio un leve tick nervioso en el ojo al recordarlo, que supo disimular con facilidad al girarse para dirigirse hacia donde tenía su mochila, de donde sacó una botella de agua que lanzó hacia Gusaar.

Puedes unirte al entrenamiento si lo deseas... - Dijo con calma mientras sacaba otra botella de agua. Acto seguido se sentó sobre los restos de una columna caida y bebió un poco de agua. Después de eso intento limpiar un poco el polvo de sus negros ropajes.

Gusaar volvio a reir disimuladamente y asintio con un ligero movimiento de cabeza ante la afirmación de Sheigram. Ciertamente si fuera sencillo de vencer como santo de oro daría mucho de que hablar.

--- Tienes razón --- dijo mientras voltea a ver al santo de Libra. Quien se presenta como Genbu.

Cieramente había sentido su presencia ya hace rato. Sin embargo, al no se agresiva decidio concentrarse en el combate. Nada se escapa a los sentidos del experto cazador. A pesar de ello, la tranquilidad y a paz de Genbu pudiesen pasar facilmente desapercibidos a radar de sentidos menos entrenados.

--- Que bueno que te hemos entretenido, Genbu. --- expreso con tono simpatico mientras despliega una sonrisa. Su mano diestra se postra estirada sobre sus ojos para bloquear la luz del sol e intentar ver mas claramente al invitado. Su caja de pandora lo delata como Libra. --- Supongo que ahora podemos cobrar por el show, ¿no?. --- y vuelve a reir.

Entonces sin mucho esfuerzo toma la botella que le lanza su amigo de Capricornio. Por un instante logra percibir un cambio en el rostro de Sheigram. Un escalofrio recorre su cuerpo. Aquello es raro, pero decidio omitirlo.

--- Lanzame otra por favor Sheigram. --- le pide a su compañero de entrenamiento mientras lanza la que tiene en sus manos a Genbu. --- Seguro tienes sed con este calor endemoniado. Ven, haznos el favor de acompañarnos. Mi nombre es Gusaar por cierto, y como dijo Sheigram. El Placer es todo nuestro. --- y hace un saludo con su mano. --- De igualmanera extiendo la invitación que mi compañero te hizo. Si gustas unirte en nuestro entrenamiento, eres bienvenido. El muchacho de aca al lado. --- y mueve su cabeza ligeramente apuntando a Sheigram. --- suele ser timido y de pocas palabras, pero en el fondo tiene su corazoncito. Pero será el mejor amigo que puedas tener.

Y se ríe nuevamente. Sin saberlo, lo habia hecho de nuevo. Molestar a su amigo. Volvio a recordar que tan divertido es aquello.

-Aquellos dos parecían tener confianza entre si, quizás debido a que habían ingresado en un tiempo casi igualado como santos Dorados, que mejor forma que iniciar una amistad con alguien que pasa por lo mismo que tu en ese momento? La otra hipótesis era que ambos fuesen compañeros incluso desde tiempo atrás logrando así ambos convertirse en fuertes caballeros al servicio de Athena.

Escuchó atentamente lo que mencionaba cada uno de estos hasta que en el aire atrapó aquella botella lanzada por el santo de Sagitario quien se presentó bajo el nombre de Gusaar, por otro lado el caballero de Capricornio se presentó como Sheigram, ambos invitándole a unirse al entrenamiento algo que lastimosamente Genbu rechazó riendo un poco mientras negaba con su cabeza y mano libre-

Llevo un tipo de entrenamiento muy distinto a el de ustedes en este momento, pero de todas formas muchas gracias, hace varias semanas salí de una dura pelea y aún quedan heridas en mi cuerpo que me dejarían en desventaja -Comentó entre pequeñas risas haciendo recuerdo a su batalla contra el espectro de Wyvern quien ese día perdió la vida en manos del caballero de Libra.

El entrenamiento de Genbu actualmente consistía en la meditación espiritual, este tipo de entrenamiento había comenzado a aplicarlo luego de la batalla contra el juez infernal, de esta forma podría encontrarse le en la séptima casa del santuario sentado en el suelo y cruzado de piernas mientras a ojos cerrados entraba en un trance profundo conectándose así como el mundo astral, aunque no podría verse una forma de hacerse fuerte de esta manera, Genbu ha entrenado arduamente aumentando su poder cada vez mas.

Ahh~ vamos, somos camaradas, no hay espacio para timidez entre nosotros así que espero pronto puedas abrirte mas con todos los demás caballeros Sheigram -Sonrió un poco observando al santo de Capricornio por un momento- En fin, me siento mas cómodo desde aquí observándolos, así que tranquilos, ignorenme y sigan con sus labores

-Con un pequeño ademan les indicó que continuaran con lo suyo mientras el solo se deleitaba viendo a sus compañeros, que mejor forma de conocer a los aliados que aprendiendo de sus estilos de pelea? Genbu era un gran estratega y analista, si era necesario armar un plan defensivo u ofensivo, sería mejor que conociera a sus camaradas para así poder sugerirles de que manera sus habilidades serían mas provechosas en caso de enfrentarse a una nueva guerra-

Como era de esperar Gusaar se puso a hablar animadamente con el recién llegado, incluso bromeó sobre cobrar por el show. Acto seguido, mostrando su amabilidad, le lanzó su botella de agua a Genbu y le pidió otra a él. No había traído más que dos así que simplemente cerró la suya y se la lanzó a su compañero.

En silencio escuchó como Gusaar también se presentaba y al mismo tiempo extendía su ofrecimiento de entrenar con ellos. Sin embargo Genbu declinó respetuosamente la oferta, al parecer tenia otra forma diferente de entrenar y aun estaba recuperándose de unas heridas producidas en combate, por lo que les pidió que continuase con él como mero observador.

Hasta ese momento todo se había desarrollado con normalidad hasta que, de repente, Gusaar le señaló con la cabeza y se puso a decir que él era tímido y de pocas palabras, pero que tenia su corazoncito.

¿Tímido? ¿Corazóncito? Enarcó una ceja y miró seriamente a su compañero sin que su rostro mostrase emoción alguna. Sin embargo internamente sintió unas ganas tremendas de estrangularlo y zarandearlo como un muñeco por el comentario. Y por si fuera poco, la imagen mental que se generó de la escena fue lo suficientemente comica como para tener que hacer un esfuerzo considerable para no sonreir. Si algo no le faltaba era precisamente imaginación y esta no dudaba en ofrecerle momentos como ese, en los que ponía en peligro su perfecta compostura.

Genbu, creyéndose las palabras de Gusaar, comenzó a decirle que no debía ser tímido entre camaradas, lo que hizo que desviará su mirada hacia él. - No soy tímido sino más bien alguien solitario. - Respondió con calma mientras se cruzaba de brazos.

Al parecer, segun decia Genbu, venia de una pelea muy dura y se encuentra lastimado. Su entrenamiento parecia mas interno y de sanacion, que fisico o al menos eso penso Gusaar con respecto a su respuesta y la actitud pasiva que mantiene. Sagitario tomo la botella que le lanzo Sheigram. La destapo y dio un trago sin juntar los labios a la boca de la misma, pues vio que es la misma de su compañero. Al parecer no tenia otra.

Gusaar sonrio al ver la actiud de Sheigram. Al parecer su broma habia molestado nuevamente a su compañero. Aquello es era tan divertido que podria hacerlo mucho rato, pero tampoco tenia que presionar tanto. Un dia de estos sin duda, Capricornio reaccionaria de la manera que seguramente contiene. Entonces lanzo nuevamente la botella a Sheigram.

--- Piensa rapido. --- le dijo para no tomarlo desprevenido. --- Gracias por el agua.

Se trono los dedos de las manos. Puso su mano diestra en el cuello y tambien lo trono. Movio los brazos en circulos intentando aflojarlos. Luego miro nuevamente a Genbu.

--- Es una lastima Genbu, seguramente hubieramos aprendido mucho de combatir contigo. Lamento escuchar lo de tus heridas, pero afortunadamente te tenemos con nosotros, que es lo que mas importa. --- expreso con amabilidad mientras tambien se recarga en una columna cruzado de brazos. --- Creo que podemos tomarnos un descanso. No soy muy bueno ignorando a las personas, como la novia de cierta persona. --- Al parecer, simplemente no puede evitar molestar a Sheigram, aunque esta vez no hizo ningun movimiento para decir que es a el, pero seguramente lo atraparia. --- Asi podriamos conocernos un poco mejor, y tener una charla amena. Quien fue tu oponente? Platicanos de la pelea. Seguramente podemos aprender de ella tambien nosotros.

Entonces guardo silencio nuevamente, esperando las palabras de sus compañeros y hermanos de armas.