El guerrero es tan fuerte como sus motivos (Gaiden)

Despues de aquel ultimo esfuerzo pude sentir como todo se volvia oscuro y la conciencia me abandono.

Lentamente la luz se filtraba y las fuerzas volvian a mi, abri los ojos con gran esfuerzo y usaba el dorso de mi mano derecha para poder alejar un poco de aquella destellante luz.

-Desperto!!! ya esta despierta!!-

No podia verla pero por la voz deducia que se traraba de una niña. Rapidamente un aldeano se acerco y me ofrecio algo de beber, con gran esfuerzo tome la taza y bebi toda el agua de un sorbo e intente levantarme lo cual me resultaba imposible pues la armadura me agregaba demasiado peso, y fue en ese momento que entendi el peso de mi cargo y el peso de mi mision.

Me libere de mi armadura y la guarde en su caja, ella habia aguantado aun mas que yo y merecia un descanso. Me levante y decidi caminar por el lugar, la batalla habia dejado demasiada destruccion y no solo en ese lugar, otros lugares del pueblo tambien estaban dañados y aunque la gente parecia haber sobrevivido, Rodorio parecia destruida.
En cuanto me senti mejor decidi ayudar a reconstruir parte de Rodorio. Sali con rumbo a las montañas a buscar material.

Despues de unos minutos llegue a una gran roca de la cual podria sacar piedras para construir las casas. Encendi mi cosmos y golpee la piedra partiendola en varias piedras pequeñas que lleve a Rodorio.

Para el anochecer y despues de un gran esfuerzo, logre llevar una gran cantidad de material al centro de Rodorio y la gente parecia bastante agradecida con eso. Despues de una cena cortesia del pueblo, lleve mi caja de pandora a la espalda y me encamine al santuario.

El sol moria en el horizonte entre tonos morados y naranjas envolviendo entre sombras al pueblo de Rodorio, aun podia distinguir a la gente que se acercaba a tomar los materiales que habia dejado para reconstruir y me preguntaba, por que en vez de abandonar el pueblo, la gente decide quedarse y reconstruirlo todo? Me resultaba intrigante ese hecho pero mientras caminaba descubri la respuesta: Esa gente tiene fe en Atenea y sus guerreros y que ellos los protegerian, y ahora tambien tenian esa misma fe en Poseidon y nosotros. Mire al cielo donde las primeras estrellas hacian aparicion y me preguntaba si yo podria tener la misma fe que esos aldeanos.

Al llegar al santuario y verlo levantarse tan imponente lo entendi. No necesito tener esa fe inquebrantable, yo debo tener la fuerza para responder a esa fe inquebrantable. Sonrei a mi misma y me dirigi al primer templo del zodiaco.